sábado, 20 de enero de 2018

Mi enemigo.

0

Miré al lado contrario de dónde se encontraba mi reflejo por que era más fácil. Siempre fue más fácil huir que enfrentarme a aquello que tenía miedo, aquello que me creaba inseguridades, aquello que me hace ser lo que odio ser. He creado yo mis propias sombras, he dejado que me consuman al punto de ni si quiera tener las suficientes ganas de luchar por lo que quiero.

He evitado lo que más me gusta y apasiona por que eso sería enfrentarme a mi misma de nuevo y es algo que no quiero volver a hacer. No quiero mirarme en ese reflejo otra vez, no quiero tener que ver lo que odio.

Mil veces he he dicho a mi misma que todo volvería a ser como era antes, posponiendo las cosas que me gustaban por que estaba demasiado cómoda en mi zona de confort. He buscado razones donde no las hay, y me he preguntado cada día que estoy haciendo en mi vida y por que la estoy desperdiciando.

Me pongo límites, sé en el fondo que nunca llegaré a hacer realidad aquel que es mi sueño, no por que no pueda, si no por que yo misma me pongo límites, límites marcados por mi reflejo, por lo que se ve a través de mi reflejo.

Cuantas veces he dicho que no a algo que sí quería hacer, cuantas veces me he parado frente a un grupo de personas y me he preguntado que es lo que me pasa que no puedo ser yo; ellos no me ponen lo límites, de nuevo me los pongo yo.

A veces simplemente quisiera poder volar y poder sentir la libertad, justo lo que él me estaba enseñando a hacer y lo que se cansó de hacer por que de nuevo yo me ponía límites.
De nuevo yo me volvía tóxica para mi alrededor.

Encontrarme mirándome al espejo, deseando dejar de ponerme límites y aprender a querer cada centímetro de mi misma, en vez de verme como mi propio enemigo.
Y es que es la realidad,
mi único enemigo,
soy yo misma,
marcando en un reflejo,
lo que odio de mi misma.

0 comentarios:

Publicar un comentario